Inspiración que está justo en frente tuyo

Publicado en: 15.08.2016
Escrito por: Aleksandra Olenkova

Siempre he sido pesimista. Una de las ideas que siempre he tenido en mente es que no tengo el poder de cambiar el mundo que me rodea ni de cambiar mi vida. ¿Alguna vez has sentido que los cambios dramáticos en ti o en tu vida son irreales? ¿Que cambios significativos pueden estar en la vida de cualquiera pero no en la tuya?

Incluso después de mudarme a otros países y haber volado a miles de kilómetros de todo y de todos los que conozco, todavía no estaba satisfecho con mis habilidades para influir en mi vida.

Mi papá siempre ha sido mi modelo a seguir, desde la más tierna edad, cuando deseaba usar anteojos y era la persona más inteligente del mundo. Y durante la mayor parte del tiempo que lo conozco, ha sido obeso. Recuerdo las dificultades que tuvo nuestra familia para comprar su ropa porque, por alguna razón, la talla XXL es rara.

Otro flujo que no quería copiar era fumar. Fácilmente podía fumar un paquete al día y no podía prescindir de él.

De repente, en diciembre, 2015 mi papá decidió: "Año nuevo, vida nueva". Decidió dejar de fumar y perder peso. Y lo hizo.

Comenzó a ir al gimnasio todos los días y desde enero 2016 nunca se ha fumado un cigarrillo en la boca. Al principio, era difícil creer que veinte años de una adicción letal y la ausencia total de cualquier actividad física puedan borrarse y que la vida de un hombre adulto pueda comenzar desde una nueva página.

Después de solo 4 meses, cuando regresé a casa para mis vacaciones de Semana Santa, fue un shock.

Desde XXL y, a veces, incluso XXXL, mi padre tuvo que cambiar su tamaño a M. En lugar de ir al balcón cada media hora, iba al gimnasio todos los días. Mi cerebro no podía procesarlo, cada vez que regresaba del trabajo, mis ojos simplemente no podían adaptarse a lo que veían. Tuve que olvidar que durante los últimos veinte años, mi padre era una almohada grande y blanda y que ahora es un hombre sano que parece tener una edad menor que su edad, por lo que algunas personas creen que soy su esposa, no una hija.

Esto me ha enseñado algo. Tienes el poder de cambiarte a ti mismo y al mundo que te rodea y de dar forma a lo que quieras. Cada pequeño esfuerzo de cada día que probablemente ni siquiera tú le preste atención se suma y se convierte en el cambio dramático que todos admiran y que hace que todos piensen:

Desearía que esa fuera la historia de mi vida, desearía poder hacer eso.